MARTIRES DE LA FAMILIA VICENCIANA EN ESPAÑA

PROCESO DE CANONIZACIÓN ABIERTO EN LA DIÓCESIS DE MADRID
EL 30 de junio de 2004. denominado:

P. JOSÉ MARÍA FERNÁNDEZ SANCHEZ
Y XXXVIII COMPAÑEROS

por Sor Josefina Salvo Salanova HdlC

Il Santo Padre, Papa Francesco, ha autorizzato, in data 23 Marzo 2017,
il Decreto sul Martirio

La Beatificazione avrà luogo sabato 11 novembre 2017 mattina, a Madrid,
e coinciderà con il 400mo anniversario del carisma vincenziano (1617-2017).
PARA CUALQUIER INFORMACIÓN PARA CONSULTAR EL SITIO ATENDIDO:
www.beatificacionmartiresvicencianos.org

Este grupo de mártires de la familia vicenciana lo constituyen 33 miembros de la Congregación de la Misión, 17 de ellos sacerdotes y 16 Hermanos coadjutores, cuyo proceso ya inició el Sr. Patriarca en noviembre de 1960 y ahora debemos completar adaptándolo a la nueva normativa canónica. A estos 33 religiosos se han unido seis seglares, Caballeros de la Medalla Milagrosa, primicia de un laicado militante que alimentó su fe bajo la mirada maternal de la Virgen en Basílica de Madrid, se formó en la escuela de S. Vicente de Paúl, convivió con los mártires Paúles, con ellos participó de su misión apostólica y caritativa y, como ellos, fueron víctimas de una feroz persecución religiosa que pretendía exterminar la Iglesia en España. Debo advertir que no son los únicos seglares de la Asociación que entregaron su vida en defensa de la fe. De las listas de congregantes con fama de martirio que la Basílica confeccionó en 1939 se han seleccionado estos seis, porque se dispone de una documentación oficial fidedigna, que acredita con nombres y apellidos que fueron hechos prisioneros y asesinados por el único motivo de constituir la junta directiva de la Sección de Caridad, en la mencionada Congregación Mariana y, además, contamos con testigos directos entre sus familiares y amigos. Es una página bellísima de la historia de la Iglesia y de la Familia Vicenciana, a la cual nos queremos acercar con respeto y devoción, convencidos de que su ejemplo y su intercesión nos han de ayudar a superar las tentaciones de mediocridad y falta de esperanza que constantemente nos amenazan.

En 1936 la Congregación de la Misión tenía en la Diócesis de Madrid cinco comunidades dedicadas a los ministerios propios del Instituto, entre los que cabe destacar: la intensa predicación del evangelio y de la moral cristiana en las misiones populares, en las que se buscaba una auténtica renovación espiritual en las parroquias; la atención a las Hijas de la Caridad; el culto público, la celebración de sacramentos, en especial de la eucaristía y la penitencia y el servicio sacerdotal en todos sus templos; con una singular organización de la caridad y la promoción del necesitado, directamente y a través de las Asociaciones de laicos. Veámoslo con detalle.

Esta Casa Provincial de García de Paredes, 45, con 37 sacerdotes y 19 hermanos coadjutores. La noche del viernes 24 de julio de 1936 fue asaltada por un tropel de revolucionarios que atacaron por sorpresa las tres puertas del edificio simultáneamente. De momento los milicianos pensaron matar a todos los frailes juntos, pero eran muchos y decidieron aplazarlo. Algunos pudieron escapar al día siguiente y refugiarse con familiares y amigos, otros fueron hechos prisioneros. A esta comunidad corresponden 13 de los Siervos de Dios de este Proceso, a la cabeza de los cuales está el Superior en funciones, P. Ibáñez.

Otra comunidad, sita en la calle Lope de Vega, 38, junto al Noviciado de las Hijas de la Caridad de 9 sacerdotes casi todos destinados a su formación y dirección espiritual y 5 hermanos coadjutores, fue la obra más perseguida. Sólo sobrevivieron 4 sacerdotes y éstos porque estaban fuera de Madrid. Son 10 los mártires de esta comunidad entre ellos el P. José María Fernández que encabeza este proceso.

Una tercera casa en el pueblo de Hortaleza (Madrid) con 6 sacerdotes, 17 hermanos coadjutores y 36 novicios. Los novicios y parte de sus formadores habían sido enviados oportunamente a Tardajos (Burgos), quedando en Hortaleza 16 religiosos. Todos fueron hechos prisioneros el 21 de julio y 6 de ellos matirizados.

La casa de Valdemoro (Madrid) con 5 sacerdotes y 4 hermanos coadjutores. También éstos fueron apresados el 25 de julio conjuntamente y conducidos primero a la cárcel de Getafe y luego a la de Ventas, siendo martirizados 2 sacerdotes y un hermano.

Una pequeña comunidad sita, en la Calle Fernández de la Hoz, 21, integrada por 5 Padres pertenecientes a la Provincia de Aquitania. De aquí martirizaron al P. Manuel Requejo Pérez.

Para mayor claridad en mi exposición, seguiré el orden cronológico.
Las primeras víctimas fueron los Hermanos
VICENTE CECILIA GALLARDO

de 22 años, natural de Cabra (Córdoba)

y MANUEL TRACHINER MONTAÑANA,

de 21 años, nacido de Puzol (Valencia) y educado con las Hijas de la Caridad en la Beneficencia de Valencia, ambos de la casa de Hortaleza.
Los mataron en la carretera de Canillas, en la madrugada del 20 de julio, cuando venían a Madrid para recibir órdenes de los superiores. En el equipaje habían metido la sotana y el crucifijo y éste fue el delito que mereció su muerte inminente.

El mismo día asaltaron la residencia de Hortaleza, haciendo prisioneros a todos los PP. y Hermanos, con el párroco del pueblo. Alguna noticia confusa llegó a la Casa Provincial y el
HERMANO ROQUE CATALÁN DOMINGO

se ofreció para ir a Hortaleza, conocer la verdad y ayudarles. Gozaba ya el H. Catalán de fama de santo y era de todos conocido su deseo del martirio. Antes de salir pidió la bendición del Superior y advirtió a sus compañeros. "Si no vuelvo, recen un tedeum". No buscó el martirio, sencillamente lo presintió y lo aceptó como lo que es, una gracia de Dios. Disfrazado con una blusa oscura y un bastón pudo llegar hasta Hortaleza, y allí, junto al convento de la Sagrada. Familia, le interrogaron y lo mataron porque era un fraile. Era natural de La Aldehuela (Teruel) y tenía al morir 62 años. Su principal maestro espiritual había sido su padre, que después de varios años de viudo entró de Hermano Lego en la Trapa de Dueñas (Palencia) y dejó tras de sí una estela de virtud y sencillez evangélica.

El P. JOSE IBÁÑEZ MAYANDÍA,

como superior había sido especialmente amenazado en la noche del 24 de julio. Valiente y cumplidor de su deber permaneció en la casa y el domingo 26, muy temprano, salió a decir misa en el vecino Hospital de convalecientes, fue detenido y apresado en las Escuelas Católicas, convertidas ya en el Ateneo Libertario de Chamberí y, por supuesto habiendo despedido a las Hijas de la Caridad, sus propietarias. Lo dejaron por muerto en la Dehesa de la Villa, pero al día siguiente, al ir a fusilar a otra víctima, lo encontraron con vida, y regresaron con él hasta las Escuelas Católicas donde lo terminaron de matar de la forma más cruel y ofensiva para su condición de sacerdote. Natural de La Puebla de Híjar (Teruel) fue martirizado el 27 de julio de 1936 a la edad de 59 años. Había sido un celoso misionero. Durante la guerra de África acompañó y se ocupó del cuidado espiritual de las Hijas de la Caridad destinadas al Hospital de Larache.

El 11 de agosto aparecieron junto a las tapias del matadero los cadáveres del
H. PERFECTO DEL RÍO PÁRAMO,

y del H. ESTANISLAO PÁRAMO MARCOS,

primos entre sí, con el del capellán de la iglesia de S. José, D. Cecilio del Río, hermano del primero, que los acogió en su casa. Había sido descubierta su condición religiosa y hechos prisioneros 3 días antes. Ambos eran naturales de Pedrosa del Río Urbel (Burgos) y tenían 54 y 51 años respectivamente.

El 12 del mismo mes martirizaron al
P. HILARIO BARRIOCANAL QUINTANA,

como los dos anteriores de la comunidad de García de Paredes y también burgalés, de Quintanavides. Era secretario del Provincial y capellán de la obra social "la gota de leche" de la calle Espada. Allí se refugió, pero el 9 de agosto los milicianos del Círculo Socialista del Puente de Segovia, se incautan del edificio. El P. Barriocanal pasa como pariente del portero, alguien les delata y el día 11, a las 6 y media de la tarde, le conducen a la iglesia de Sta. Cristina. Lo asesinaron en la Casa de Campo el 12 de agosto de 1936. Tenía 67 años.

En la segunda quincena de agosto el panorama de Chamberí es espantoso. La parroquia de Sta. Teresa y Sta. Isabel destrozada, la Basílica convertida en cuadra, en las casas religiosas se habían instalado checas. El 21 de agosto es martirizado en el cementerio de Aravaca el congregante
JOSÉ GARVI CALVENTE,

natural de Madrid, de 55 años, empleado del comercio, casado y con una hija, después de pasar por la checa del partido comunista Radio 9, sita en Santa Engracia 46. El 23 del mismo mes, en la checa del Cuartel de la Montaña, son martirizados otros cuatro Congregantes de la Milagrosa, a saber:

JUSTO RAMÓN PIEDRAFITA,

natural de Huesca, de 40 años, portero, casado y con 6 hijos.

AGUSTÍN FERNÁNDEZ VÁZQUEZ, natural de El Escorial (Madrid), de 41 años, cartero, tesorero de la Asociación y persona siempre disponible en la Basílica, casado sin hijos.

FELIPE BASAURI ALTUVE, natural de Bilbao, de 55 años, empleado, casado y con 3 hijas;

y EDUARDO CAMPOS VASALLO, natural de Orduña (Vizcaya), de 52 años, ayudante de Obras Públicas, casado y con 6 hijos. Los cuatro pasaron por el Círculo Socialista del Norte, instalado en el convento de las Esclavas de Martínez Campos, 8, que fue la checa encargada de buscar a los Congregantes de la Milagrosa.

EL P. MANUEL REQUEJO PÉREZ

entró en la Congregación siendo canónigo del Burgo de Osma. En la persecución religiosa se refugió en las Hermanitas de los Pobres de la Calle Doctor Esquerdo, pasando como un anciano más. En las mismas condiciones se encontraba el Redentorista P. Antonio Girón, y a los dos los martirizaron juntos el domingo 30 de agosto, acusados por un miliciano a quienes sus compañeros habían puesto de portero en la Residencia. Al ver que los iban a matar se confesaron mutuamente e iniciaron juntos el rezo del rosario. Era natural de Aranda de Duero (Burgos) y tenía 64 años.

El P. ELEUTERIO CASTILLO GÓMEZ

era subdirector de novicios. Tuvo serenidad para ir al convento de Trinitarias, de donde era capellán a consumir el santísimo, pero inmediatamente fueron hechos prisioneros los 16 miembros de la comunidad de Hortaleza. Por mediación de un pariente pudo salir de la cárcel, pero siguió vigilado y volvieron a apresarle, esta vez llevándose también a su cuñado Juan Alonso Hidalgo, Guardia Civil. En el Cuartel General, donde vivía su hermana era muy conocido como sacerdote Paúl. Precisamente en el mes de mayo anterior había administrado la comunión a sus dos sobrinas y otras niñas en la vecina Iglesia de las Salesas, en una ceremonia muy concurrida. Una de esas sobrinas, es Carmelita Descalza en el Monasterio de Loeches (Madrid). La denuncia vino de uno de los guardias del Cuartel. En la madrugada del 3 de septiembre, fusilaron a los dos, junto al cuartel. Iba a cumplir 33 años. Había nacido en Marmellar de Arriba (Burgos).

A la comunidad de Lope de Vega pertenecían los PP.
MAURILIO TOBAR GONZÁLEZ


Y PONCIANO NIETO ASENSIO.

El primero superior de la Casa de Capellanes, el P. Nieto un famoso escritor de literatura religiosa y vicenciana. Se refugiaron en Abascal, 9, en casa de Dª Julia Angulo Pozas, prima del primero y mataron a los tres, a los dos sacerdotes y a Dª Julia, el 23 de septiembre. El P. Maurilio era natural de Tardajos (Burgos), de 56 años, hermano carnal del también mártir H. Saturnino Tobar González. El P. Nieto había nacido en Valverde de Campos (Valladolid) y tenía al morir 61 años.

El P. JOSÉ SANTOS ORTEGA

natural de Tardajos (Burgos), de 54 años de edad, fue víctima de la traición de un joven que fingió protegerle. Al tener que salir de la Casa Provincial se refugió en casa de unos parientes en la Guindalera, pero fue denunciado y es entonces cuando el joven que le debía algún favor, simuló defenderlo y lo que hizo en realidad fue conducirle al Comité. Sus restos reposan en el cementerio de Hortaleza.

Al P. BENJAMÍN ORTEGA ARANGUREN

le había acogido con gran caridad una familia abulense y allí permaneció haciendo vida monacal hasta el 13 de octubre en que lo llevaron a la Checa de Fomento. Sus bienechores removieron cuanto estuvo de su parte por salvarlo, incluso buscaron a un miliciano conocido, el cual les confesó que "por tratarse de un sacerdote y religioso, no podían hacer nada, porque la gente de izquierda estaban juramentados a hacer desaparecer a todos los curas". Murió mártir el 19 de octubre de 1936, a los 51 años de edad.

Y nos acercamos a unas fechas eminentemente martiriales: las vísperas de la fiesta de Cristo Rey, que se celebraba el último domingo de octubre. El viernes 23 es el día elegido por los verdugos para acabar con el grupo de Paúles que desde finales de julio mantuvieron en régimen carcelario, carentes de lo más necesario y en constante amenaza de muerte, en el número 4 de la calle San Felipe Neri. Son los llamados mártires de Vallecas, por haber sido martirizados y enterrados en el cementerio de dicha villa madrileña, cuyos cuerpos se pudieron rescatar e identificar junto a los de tres Hijas de la Caridad. En nuestra Casa Provincial se llamó "dormitorio de los mártires" al local donde se velaron sus restos mortales, en noviembre de 1941. Son 8 en total: 3 sacerdotes y 5 hermanos. Estos son sus nombres:

P. JOSÉ Mª FERNÁNDEZ SÁNCHEZ,

subdirector y formador de varias generaciones de Hijas de la Caridad. Gozaba de fama de santo ya en vida. Supo ver con claridad el peligro y junto con la Visitadora, Sor Justa Domínguez de Vidaurreta, también en proceso de canonización, pusieron a salvo el numeroso noviciado, quedando ambos en el punto de mira de la persecución, para no dejar de atender a las Hermanas. Tenía 61 años y había nacido en Oviedo. Antes había sido Vicevisitador de la India y Profesor de varios seminarios.

P. ROQUE GUILLÉN GARCÉS

de 57 años. La fama de martirio del P. Roque se mantiene viva en su parroquia de Sarrión (Teruel) y su nombre unido a la Adoración Nocturna, porque Zaragoza, que fue la segunda fundación de España, celebró la primera vigilia el 28 de mayo de 1879, coincidiendo con el nacimiento de Roque Guillén y en la fiesta extraordinaria de mayo de 1939, la familia y los adoradores de Sarrión, se sintieron orgullosos de poder ofrecer en la mesa eucarística una víctima bautizada en su parroquia.

P. BENITO PARADELA NOVOA,

nacido en Amoeiro (Orense). Escritor famosísimo y muy querido en la Congregación. Trató de salvar el archivo y la biblioteca provincial, llevando personalmente lo más importante a la casa de San Felipe Neri. Tenia 49 años.

Los 5 Hermanos son:

H. SATURNINO TOBAR GONZÁLEZ,

administrador de las Fundaciones confiadas a las Hijas de la Caridad; natural de Tardajos (Burgos) de 78 años;

H. AGUSTÍN NOGAL TOBAR,

también de Tardajos (Burgos) y de 51 años, era ayudante del anterior en la administración;

H. CESÁREO ELEXGARAY DE OTAZUA,

natural de Busturia (Vizcaya), de 32 años;

H. CRISTÓBAL GONZÁLEZ CARCEDO,

nacido en Lodoso (Burgos) y de 23 años;

Y H. JUAN NÚÑEZ ORCAJO,

natural de Fontioso (Burgos), de 54 años.

Noviembre es el mes de los grandes holocaustos de Paracuellos del Jarama. En las sacas de la Cárcel Modelo del día 7 son martirizados el
P. VICTORIANO REGUERO Velasco

natural de Valladolid,

y el

H. GIL BELASCOAIN ILARRAGORRI

natural de Legarda (Navarra), de 34 y 53 años respectivamente.

De la misma prisión, sale al día siguiente el
P. LAUREANO PÉREZ CARRASCAL.

de 60 años, natural de Valladolid;
El 15, muere en la cárcel de Ventas el
P. TEODORO GÓMEZ CERVERO

de 59 años, nacido en Deza (Soria);

el 27, fiesta de la Milagrosa, martirizan también en Paracuellos a los HNOS.
PEDRO ARMENDÁRIZ ZABALETA

nacido en Amatriaín (Navarra), de 57 años

y JOSÉ GARCÍA PÉREZ,

este último novicio de 21 años, de Tuy (Pontevedra), ambos procedentes de la cárcel de S. Antón y al joven congregante MIGUEL AGUADO CAMARILLO,

en la saca de la cárcel de Porlier.

El 29, también de S. Antón, sacan hacia Paracuellos al
P. PEDRO-PASCUAL GARCÍA MARTÍN,

de 34 años, natural de Monteagudo del Castillo (Teruel); y el 30, de la misma prisión al

H. JOAQUÍN ZUBILLAGA ECHARRI

natural de Echeverri (Navarra), de 37 años y al

P. FRANCISCO MORQUILLAS FERNÁNDEZ

de Sarracín (Burgos), con 47 años.

Los tres últimos y el P. Reguero, de la Comunidad de la Casa Provincial. El recordatorio del seglar Miguel Aguado dice textualmente: "Era un pobre obrero y pertenecía a las Compañías del Cerro de los Ángeles, Adorador Nocturno y Caballero de la Milagrosa". Tenía 33 años y dejó 6 niños y a la esposa en la mayor miseria, pero con una fe inquebrantable. Convencida de que fue la Milagrosa quien se lo llevó al cielo en su fiesta, supo infundir en sus hijos esperanza.

La muerte del H. BARTOLOMÉ GELABERT PERICÁS

de Hortaleza nacido en Consell (Mallorca), de 64 años, de la comunidad de Hortaleza (Madrid) y la del

P. BENITO QUINTANO DIAZ,

de la comunidad de Valdemoro, tiene un carácter diferente. Después de varios meses en prisión, les ofrecen la libertad por ancianos e inmediatamente y, sin perderles de vista, los fusilaron, el 27 de noviembre y 12 de diciembre respectivamente. El P. Quintano había nacido en Lodoso (Burgos) y tenía 75 años. Ambos padecieron las mayores penurias en la cárcel.

Cierra el plantel de mártires de la Congregación el H. ISIDRO ALONSO PEÑA. Tenia 77 años y murió de agotamiento y malos tratos en la cárcel de Ventas el 14 de diciembre, atendido espiritualmente por el P. Manuel Rodríguez. Había ingresado en prisión el 29 de julio con sus compañeros de Valdemoro.

Ellos amaban la vida su familia, su vocación, sus ministerios. Amaban su futuro. Pero en su escala de valores Dios estaba sobre todas las cosas y no dudaron en seguir el camino difícil de la cruz, dejando tras de sí una estela martirial cuya fama se ha mantenido ininterrumpidamente entre nosotros.